Una letra,
una nota,
el nudo que desmadeja
tu ovillo.
Una palabra,
un tresillo,
tu melena descansa
en mi regazo de niño.
Una línea,
una melodía,
un paisaje que ya es parte
de nosotros.
Un poema,
una canción,
y entre las cinturas de nuestras almas
ya no hay distancia.